La advertencia de las autoridades puneñas de colocar lo que denominaron hitos ancestrales en los límites fronterizos entre Moquegua y Puno fue cumplida. Unos 200 pobladores encabezados por el presidente regional de Puno, Hernán Fuentes, y otros alcaldes de Acora y Laraquere, ingresaron a poblados como Pasto Grande July y no solo colocaron un grupo de hitos en los linderos, sino que arrancaron y se llevaron el escudo de la escuelita del lugar.La presencia policial no sirvió de mucho, aseguró el regidor Juan Rodríguez quien acompañado de Francisco Chávez y Melciades Copa llegó hasta el lugar. “El compromiso de la policía era resguardarnos y mediar un diálogo para evitar que los hitos sean colocados, pero esto no se cumplió”, reprochó el concejal
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